jueves, 2 de diciembre de 2010

La importancia de hacerle caso a las señales.

Esta ha sido una semana laboral que puede ser calificada literalmente como un infierno en el que ha sucedido TODA clase de eventos desafortunados que han puesto en jaque no sólo mi paciencia sino mi salud física y mental.
Omitiré algunos detalles, pero
El día de ayer (entre otras cosas) mi jefe viajó a Aguascalientes. En su agenda (planeada con 1 semana de anticipación) tenía un viaje a Guatemala para el día de hoy a las 7 de la mañana donde asistiría a una reunión para la que necesitaba una cantidad importante de documentos, mismos que para elaborarlos, me tuve que exprimir el cerebro diplomáticamente.  A las 6 de la tarde, me llamó por teléfono para avisarme que había olvidado su pasaporte en Villahermosa, que una persona lo traía en un vuelo que llegaba al DF a las 840 y que por favor enviara a alguien a recogerlo y que después pasara por él a su regreso de Aguascalientes a la terminal 2.
(el chofer desaparecido)
7.00 cambió la instrucción. Me regreso en un vuelo privado. Que recojan mi pasaporte y yo les aviso a qué hora hay que ir por mí.
(el chofer desaparecido)
Justo cuando me disponía a irme YO personalmente al aeropuerto para interceptar al "mensajero" sonó el teléfono. Había una broncota enorme relacionada al contenido de los documentos que él llevababa para su exposición en Guatemala. Obvio no podía moverme de la oficina.
(el chofer desaparecido)
Plan B.- Le llamé a uno de los asistentes que en ese momento se encontraba atorado en el tráfico de esta ciudad con una bola de choquitos que no sabían moverse en la capital y que aún así se atrevieron a traer auto. Le pregunté que en cuanto tiempo se desocupaba para que se fuera en metro al aeropuerto a interceptar al "mensajero". Hay demasiado tráfico, contesto; pero haré lo posible.
Ya eran las 7.40 (el chofer desaparecido)
Yo atorada en llamadas. Llegaban mensajes por minuto de mi jefe preocupado por la noticia relativa al contenido de los documentos. Y pedía más y más y más cosas. (el chofer desaparecido)
8.10 el asistente atorado en el tráfico pero a punto de llegar a su destino. 8.20, tomó el metro rumbo a la estación boulevard puerto áereo. Tenía 20 minutos para llegar desde la estación zócalo.
Yo rezaba el rosario, mientras hacía llamadas y llamadas para enterarme si el contenido de los documentos que me costaron la mitad de mis neuronas iba a seguir como estaba previsto o tenía que cambiar de última hora. Me dolía la cabeza, yo creo que porque del nervio me estaban brotando a toda velocidad más canas.
8.30 Parsimoniosamente cruzó la puerta el chofer, con una gran sonrisa en los labios y con un jocoso "buenas noches tamarita, qué es lo que le tengo que llevar al jefe".
"Sientate Ricardo por favor, ...." Fueron las únicas palabras que pude pronunciar mientras a mi celular llegaban más y más mensajes "y mi pasaporte?" "y mis llamadas" "apenas voy por el metro oceanía".
No sé cómo pude guardar la compostura porque tenía ganas de aventar el monitor y al chofer por la ventana y ver mi ira descender vertiginosamente desde el piso 15 y estamparlo en el piso 1.
(el regaño lo omitiré)´
8.50 Tuve que confesarle a mi jefe, que el chofer desaparecido acababa de aparecer, que no sabía si podría conseguir que el asistente interceptara al mensajero en el aeropuerto y que aún no tenía pasaporte.
"Y ahora? yo tengo que salir a Guatemala mañana a las 7 de la mañana, y como vas a localizar al mensajero?" (no pudo pensar en eso antes de salir de su casa y olvidar su pasaporte?)
"En eso estoy Sr. estoy haciendo TODO lo posible por conseguir su teléfono para ver en dónde lo puedo alcanzar"
Plan C.- Con la mayor de las vergüenzas tuve que interrumpir a uno de mis ángeles de la guarda justo cuando hablaba en una presentación pictórica y no podía contestarme el celular. Insistí e instití hasta que pude comunicarme. Me dió el teléfono del "mensajero".
9.10 Ya con el teléfono en mano le pedí al chofer que llamara él y que intentara resolverlo. Mientras tanto, el asistente llegaba corriendo al aeropuerto y vió... ahí... paradito en la fila de los taxis; justo a una persona de subirse a uno y desaparecer al portador del mentado pasaporte.
9.15 El pasaporte estaba en nuestro poder.
Así sucedieron las cosas y entre llamadas y mensajes dieron las 11 de la noche. Mi jefe llegó en su vuelo privado, y ya tenía los documentos corregidos, el asunto arreglado, pasaporte en mano y MUY mal humor.
Afortunadamente pude guardar la compostura hasta que me subí al auto dónde lloré como chamaquita desprotegida. Llegué a casa, recordé que no había desayunado y obviamente portaba un olor a cenicero de antro que me traía idiota. Además no había nada para preparar más que atún.
(omitiré mis pensamientos)
Tomé doble dosis de té de tila, pastilla para dormir y tomé la decisión de no hacer ningún tipo de análisis del día. Me quedé profundamente dormida.
Hoy desperté temprano. Mi cabeza comenzó a girar y a pensar y a analizar muchas cosas. Por un momento pensé que apagaría el teléfono y no vendría a trabajar.
No sé por qué olvidé apagarlo pero se me fué el tiempo tomando café, viendo televisión y leyendo algunas cosas al mismo tiempo que la confusión sobre mi futuro crecía.
9.45 am. Sonó el teléfono.
La agencia de viajes llamaba para avisar que el vuelo Guatemala México programado para hoy a las 8.10 de la noche del día de hoy, había sido cancelado por cuestiones de operación.
........................
Mandé el respectivo mensaje, notificando a mi jefe del inconveniente.
-Pero cómo??? Cómo puede ser que no lo supieras???
-Señor, no entiendo cómo cuando usted documentó a las 7 de la mañana no le notificaron esto en la aerolínea.
- Pues eres una "mentirosa" por que aquí tengo a dos personas más que regresaban en el mismo vuelo y ellos no saben nada.
- Yo le sugiero que les diga que marquen a su oficina y que confirmen el dato.
- No sé cómo le vas a hacer pero necesito estar mañana temprano en villahermosa.
........................
Busqué todas las vías. Panamá, El salvador, Costarica,.... la única opción era vía Houston (ooobvio había olvidado su visa)
- La única opción que puedo darle es mañana saliendo a las 7 de la mañana vía Panamá y llegando a México a las 14.30 y enlazarlo a villahermosa a las 16.30
No!... algo tienes que hacer. (por un momento pensé que me apellidaba TACA, pero no....)
Pues después de todos los intentos habidos y por haber, afortunadamente mi "mentira" se validó cuando los otros dos asistentes confirmaron en sus respectivas oficinas que lo que yo había dicho era verdad, que la única opción era la que yo estaba dando. Pero eso sí. Jamás agradeció la eficiencia de ser el primero en tener esa información.
Luego siguió lo del hotel. Todos llenos.
En fin. Apenas son las 4.41 pm y aunque todo está cubierto, mi jefe aún no está "satisfecho" con el resultado de las cosas, y por supuesto quiere que yo haga por teléfono esas cosas que sólo puede hacer él directamente en el mostrador de la aerolínea.
Moraleja....
El destino se encargó el día de ayer de darnos todas las señales necesarias para entender que él NO debía volar a Guatemala. Retamos al destino, hicimos magia, conseguimos todo, y al final. Murphy hizo lo que se tenía que hacer... dejarlo varado en otro país, porque la señal era que no debía de ir y no pudo ni quiso entenderlo.
Esta experiencia me ha dejado muchas cosas, además de tensión nerviosa y un cuello que apenas puedo mover.
Creo que debo de ver mis señales. Esas que me están diciendo que no tengo que aferrarme a resolver los imposibles. Que a veces las cosas pasan por algo y si no se dan es por que en realidad no deben de darse.
Sé que debo de cambiar de trabajo. Pronto. Desafortunadamente no me atrevo. No entiendo por qué tengo tanto miedo de dar ese "salto mortal" que me lleve quizá a una vida más tranquila y económicamente más redituable.
Lo que si rconozco es que hay algo en mi que está cambiando. Que tiene la imperiosa necesidad de revalorar los 8 años que le he regalado a este negocio (sean cuales sean las causas y razones) y quizá volover a replantear todo desde el principio. Sea lo que sea que eso signifique.
Tengo mucho que pensar y sobre todo que decidir y poner en acción. Afortunadamente hoy tengo terapia, misma a la que hoy creo que llegué por creerme la "todopoderosa".

lunes, 29 de noviembre de 2010

La maldición de los lunes

Sigo sin entender por qué los lunes nunca puedo hacer nada por la mañana. Bueno, no voy a exagerar. Si; hago muchas cosas, pero me resulta realmente difícil poder salir de casa así que trabajo desde aquí. Hasta que hada madrina llega y me corre.
Debo reconocer que me siento mejor. La "happy pill" ha funcionado como debe de ser y mínimo mi ánimo es un poco más..... "productivo" que en días pasados.
En lo personal han sucedido muchas cosas. Pero creo que la más importante es el redescubrimiento de cosas que tenía seriamente olvidadas. La aparición de nuevas pasiones y sobre todo el aprendizaje empírico de cosas que espero me lleven a algún talento que me permita disfrutar un poco más del tiempo.
Es vergonzoso reconocer la "adicción" que comienza a hacerse hábito este fin de semana. Y vergonzoso es por el tiempo que me pasé renegando de eso, además de los recuerdos que esa nueva adicción me trae.
Este fin de semana he aprendido tantas cosas de mí misma con tan poquito que asusta.
No sé cuánto tiempo más tenga que pasar y cuántas experiencis más hacen falta para llegar al periodo de paz que tanto anhelo.
Al final creo que nadie está contento con lo que tiene cuando lo tiene. Siempre se necesita más.
Queda solamente un día más del mes de noviembre. Ya. Todo lo sucedido, deseado, planeado, añorado, y vivido en el 2010 es hora de cerrarlo. Para bien o para mal. Y si, aunque este ha sido un mal año, lleno de dramas y cosas feas. De retos cada mes más difíciles. Aún no puedo relajarme. Todavía falta diciembre. Será que al fin las cosas se acomoden o todavia quedan sorpresas de esas que te dejan mudo.
No lo sé. Aunque cada día estoy más segura de que las cosas suceden por algo y llegan cuando tienen que llegar.
Volviendo a leer esto. Así o más dispersos mis pensamientos?

jueves, 25 de noviembre de 2010

Incapacitada para brillar

He escrito ya muchas veces sobre mis problemas hormo-emo-psiquitaricos. Y he llenado posts completos de quejas y quejas respecto a esos temas.
Hoy estoy triste. La verdad no tengo razones para estarlo, al contrario. Todo lo que ha pasado en los días recientes serían motivo suficiente para que una persona normal sintiera un poco de éxito, alegría y sobre todo estuviese brillando más que un foco de 200 watts.
Yo no.... Hoy estoy gris. No tengo humor de nada, más que de hacer lo que tengo que hacer e irme.
Hoy me siento más gorda de lo que nunca he estado.
Hoy me molestan incluso los mensajes lindos del día pero no tengo la suficiente honestidad para decir. "Hoy no me mandes mensajes porque me siento así:..."
Sé que no soy yo. Sé que todo es un efecto secundario de un desajuste químico hormonal que no me permite disfrutar la vida como debería, perome siento enojada por eso.
Desearía tanto ser una persona normal. Y no entiendo por qué no puedo serlo.

miércoles, 24 de noviembre de 2010

Vaya tarde!

Pues si, tenía una cita a las 3. Y por más que hice todo lo que estuvo en mis manos para poder liberarme a esa hora; siempre Murphy y sus artimañas llegan en el momento menos indicado y viene a deshacer los planes.
Así que bueno,... Mi interlocutor estaba en el lugar del encuentro y justo al llegar su mensaje para notificarme su asistencia, por la puerta de entrada cruzó mi jefe. Oooobvio quería salirme por la ventana!
Ni modo, como el deber es más importante, entre que el nervio no me dejaba y quería escapar intenté darle los pendientes lo más rápido posible y rogarle a todos los santos para que se fuera rapidito. "Rapidito" tardó media hora.
Luego la espera del elevador..... Eterna.
Cruzar la calle que se hacía interminable.
Valió la pena el estrés. Mucho.... El tiempo se fué como agua y ahora sólo sé que todo va a ser mucho más dificil...
Ay Murphy!!!.... Cómo te encanta!!!

martes, 23 de noviembre de 2010

Reuncio o no renuncio.... ese es el dilema

Son las 15.46, estoy sentada en mi oficina tratando de controlar la colitis causada por estrés laboral o eso que más bien me gustariá llamarle "poca atención que me pone mi jefe".
En fin. Creo que de nada sirve ponerle mucho empeño a las cosas que no más ya no dan. Como lo es este empleo. Entonces... aquí sentada (y después de que me he dado cuenta de que ha sido un día malo laboralmente hablando no sólo para mi) estoy reconsiderando seriamente mi camino profesional.
Sí, reconozco que ya no me apasiona lo que hago (punto principal para desempeñar bien un puesto), que ahora caigo en cuenta (8 años después) de que quizá jamás fué lo mío, que mi salud física y mental, merece menos estrés o mínimo cierto tipo de presión que sirva para incrementar mi capital económico, no tener que poner de mi sueldo para poder trabajar... así eso ya no es negocio.
En fin, mientras intento por medio de respiraciones bajar mi nivel de enojo antes de que llegue mi jefe, pienso. Qué haré ahora con mi vida?
¿Cuán importante es el éxito "profesional" haciendo algo que parezca "importante" o que tenga determinado "status" cuando no tienes un peso en la bolsa?
¿Qué será más satisfactorio, hacer dinero para uno aunque sea de manera sencilla y sin glamour o seguir haciendo posibles imposibles para alguien que nada más se queja y tiene ya un buen rato que perdió el piso?
No lo sé,.... no sé qué hacer. Estoy confundida.... por lo pronto estoy buscando opciones para ver si me dedico a vender tacos o café por las mañanas en los semáforos. O sigo haciendo como que mi empleo es glamoroso y bien remunerado cuando puedo oír como me chillan las tripas de hambre y no quiero gastar para poder pagar la renta.

martes, 16 de noviembre de 2010

El día no termina

6.43... realmente no tengo nada que hacer a menos que me ponga a leer por chismosa un expediente del que claramente me dijeron "tirálo a la basura". Sigo en la oficina... el dolor ha pasado un poco gracias al analgésico y eso me hace sentir un poco más tranquila.
Odio este horario. Siento que son las 11 y estoy sentada esperando a lo tonto a que mi jefe llegue. Si es que realmente va a llegar. 
Necesito que venga. Necesito decirle que mañana tardaré en llegar más de lo normal.
Me acabo de acoerdar de aquellos libros de historias que tenían toma de decisiones. En un vago recuerdo era algo así: crees que la princesa va a tomar la llave y abrir la puerta? (pasa a la página 180) crees que el ruido la espanatrá y no se dará cuenta de la llave que está en la puerta (sigue en la página 65). Creo que por eso no sé tomar decisiones... porque ahora que recuerdo no sé si alguno de esos libros terminaban en algún momento o las decisiones siempre llegaban al mismo lugar.
Y a todo esto... crees que mi jefe llegará esta tarde? (sigue esperando) crees que te quedarás esperando hasta las 8 a que llegue y no podrás tener acuerdo (contínua escribiendo)

De regreso al infierno?

Hoy puedo entender mis posts paados.... desafortunadamente mi salud va nuevamente a la baja, por lo tanto mis emociones son correspondientes.
Ayer tuve el primer aviso claro del asunto. Dolor... toda la tarde. Soportable pero permanente. El día de hoy ya fué insoportable. Nuevamente medicina efervecente, además de mi pancita de 4 meses de embarazo reapareció, así... como por arte de magia.... en cuestión de dos horas.
Intenté hacer cita con la doctora el día de hoy. No se pudo... Entre su MUY ocupada agenda hasta el 30 de noviembre me pudieron hacer un espacio de "emergencia" para mañana a las 11.30 de la mañana. Justo en horario laboral. Ni modo. Tuve que tomarla.
No creo poder describir el terror que tengo a que el infierno regrese. A que nuevamente vuelva a sufrir los mismos cólicos, el humor, el sentimiento, la depresión. Me niego a vivir con eso.
Ojalá y sea algo leve. Algún desajuste.... No sé.
Pero tengo mucho mucho miedo.
Creo que es difícil entenderlo. Más bien creo que nadie que no conozca esto, o mi caso pueda entenderlo. Y después de tanto tiempo no sé cómo voy a enfrentar si en efecto el tratamiento no funcionó y nuevamente todo vuelva a ser como antes. Vuelva a pasar 13 días bien por 18 días mal cada mes. Volver a soportar los dolores, la retención de líquidos. La tristeza profunda..... En serio... No quiero.
Me siento pasmada con la simple idea. Pero bueno... ya mañana seguramente volveré a las toneladas de estudios, exámenes, ultrasonidos e intentos por estar bien y como siempre habré de enfrentarlo sola.

domingo, 14 de noviembre de 2010

Enfadosa reflexión dominguera

Voy llegando de cenar y tener una conversación de esas que se dan entre mujeres. No puedo negar que me siento bastante molesta por el tono final de la charla y el asunto gira en torno al respeto.
En qué momento malentendí el verdadero significado de la palabra y olvidé aplicarla en mi vida?
No lo sé. Entiendo que para todos los seres humanos quizá el verdadero significado de esa palabra sea diferente o variable. Lo que para unas personas es una falta de respeto para otras no lo es. Pero el común denominador de lo que ha pasado conmigo en los últimops años es eso. No he sabido "darme a respetar"
No entiendo si es por un asunto de educación (porque me considero una persona bien educada) pero no sé poner en práctica esa palabra para mí en las relaciones interpersonales. Y no me refiero únicamente a las sentimentales. Sino a TODAS las relaciones.
Quizá es un asunto genético que tenga más que ver con mi intolerancia a las personas y mi código genético medio oriental que me dice que diga que si a todo y ha tenido muda esa vocesita interna que dice... eso no es lo correcto.
Hoy me siento un poco enfadada por no poder exponer el punto. Por no ver que los demás respeten a los que quiero y sobre todo porque eso me reflejó el poco respeto que tengo por mí misma al permitir situaciones quizá estúpidas pero que evidentemente resultan una falta de respeto a mi tiempo, mi trabajo, mi caridad, mi humanidad, mi amistad, mi cariño y mi condición de mujer.
Desde hoy, que es el momento en el que me doy cuenta, pretendo modificar eso y comenzar a darme mi lugar. O el que creo que tengo y me he ganado a pulso con años y años de ser respetuosa con los demás.
Será que podré?

7 días

Cosas buenas y malas. Dudas, conversaciones, mensajes, esperanza que quiere y no quiere. Esperanza.
Ayer conocí a alguien. Por primera vez en mucho tiempo pude mantener una conversación horas y horas y el tiempo pasó como segundos. Obviamente en medio llegaban mensajes y si; acepto que me hicieron sonreír.
Al despedirse de mí, la persona que conocí me dijo, fué un placer, ojalá y volvamos a vernos cuando termines el asunto de los mensajes.
Confieso que me sonrrojé. Mucho, y también que sentí cierto tipo de emoción.
Al ver que la velada se prolongaba más de lo que mi cuerpo podría aguantar, me despedí, pedí un raid a mi casa y ya en cama me sentí muy bien pensando en mis mensajes. Aunque todavía mantenía cierta emoción por el deconocido recién conocido.
Dormí. Desperté y tenía muchos mensajes de personas del pasado.... todos con contenidos similares. En resúmen todos decían algo así como "quisiera estar contigo pero no terminas el asunto de los mensajes"
Eso me puso de mal humor. ¿Por qué los hombres de hoy quieren todo fácil?
Cuando yo quiero algo hago cosas para obtenerlo, aunque no tenga oportunidad. Lo intento.
Quizá estoy cerrada. Puede ser. Pero no puedo dejar pasar la oportunidad de quejarme un poco de eso.
Y si, recibí mi mensaje de buenos días. Y nuevamente salió una sonrrisa. Y?
Sé que tengo miedo, sé que hay muchas cosas que aún no tengo idea de cómo se van a solucionar.Pero lo estoy intentando aunque me esté costando todo lo que soy, porque realmente quiero, porque realmente amo, y porque realmente tengo ganas de construír algo padre.
No voy por la vida diciendo, "resuleve tus problemas y cuando te conviertas en un príncipe azul me avisas para tomarme un café contigo y a ver que pasa"
Definitivamente..... la nueva generación olvidó todo el asunto de la conquista, quieren todo fácil y en 140 caracteres.

miércoles, 10 de noviembre de 2010

#3

Despertar temprano, hacer jardinería, el frío no ayuda en lo absoluto a mi tan amada mata de albahaca, al contrario, se ve enferma, triste y amarilla.
No sé mucho de plantas, pero lo intento, así que por hoy apliqué un makeover que espero no termine de matarla.
Desperté a las 6, son 10.23 y sigo en cama con la chillante y horrorosa bata amarilla que sólo se utiliza por que es súmamente cálida.
Por el momento no hay pensamientos, ni hambre, ni nada. Sólo la pereza extrema de levantarme de la cama e intentar dirigirme a mi lugar de trabajo a sacar los pendientes que puedo hacer desde aqui. No tengo ganas de que nadie me vea. Mucho menos de que me vean la cara.
Será que hoy si me atreva a ser pelirroja?
Sigo sin entender por qué parte del proceso de una ruptura es querer cambiar todo. Desde el peso, la ropa, el lugar de trabajo, de residencia hasta el color del cabello.
Desafortundamente los hombres no hacen eso. Se verían bastante "cómicos" con rayitos, algún corte mal hecho o un nuevo look de ropa al estilo "emo".
Yo no puedo ser "emo" ni aunque lo sienta, ni aunque lo intente.... mi enorme trasero y la considerable circunferencia de mis muslos no me permiten usar esos pantaloncillos que los distinguen.
A menos que me los ponga en los brazos y camine de manos.
En fin.... ojalá y más tarde me den ánimos de salir... por lo pronto. Trabajo en casa.
Y mira que si tengo un poco de cosas que hacer.

martes, 9 de noviembre de 2010

#2

Un choque en la mañana sin consecuencias, gente hable y hable, pide y pide cosas en el trabajo. Un computadora que por sus calzones decidió no abrir archivos en pdf lo que complicó más mi trabajo. Un jefe que se encargó de venir toda la tarde a socializar sin resolver asuntos que al final resolví yo. 20 pesos en la cartera. Inapetencia.  Nostalgia, mucha, horas mirando la pantalla de un teléfono; más. Dolor... lo que le sigue. Desesperación por dormir, infinita. Arreglar el maquillaje dos veces para que no se notara que corrieron lágrimas y al final así me despidió la "tarde".

lunes, 8 de noviembre de 2010

Y ahora?

Es lunes, son las 8 de la mañana, dormí toda la noche teniendo pesadillas. Entre ellas que mi jefe sin consideración alguna tenía un sustituto para mi puesto y ahora si me quedaba sin nada.
No tengo ganas de nada, las pastillas con las que dormí anoche me hacen no poderme levantar, y debo confesar que antes de abrir los ojos recordé mi duelo y lloré. Excelente! ahora tengo que deshincharme los ojos para poder ir a trabajar.
No quiero bañarme porque hace frío, no se me ocurre qué ponerme porque todo mi clóset es aburrido, y tengo tantas cosas que hacer en la oficina que definitivamente es una irresoponsabilidad estar aqui, escribiendo a esta hora tapada hasta la cintura, despeinada y tomándome un café.
Cómo se sobrevive a una ruptura amorosa? Será que alguien tenga la respuesta. Quiero el método rápido, sencillo y que con 10 minutos al día 3 veces a la semana en menos de un mes pueda ver los resultados.
Será que si me unto el "BonBalm" que anuncia Carmelita Salinas directamente en el pecho y en el corazón el dolor sea menos y el recuerdo se vaya?
Quizá si hoy voy directo a comprarme una de esas pulceras perfect balance, tenga la energía suficiente para levantarme de la cama, caminar derechoito (porque confieso que me voy de lado) y pueda sacar adelante todo lo que tengo pendiente para hoy?
Bueno.... debo de intentarlo. Mi jefe sólo estará en la ciudad hoy y mañana así que de miércoles al próximo lunes tendré tiempo de tirarme nuevamente a sentir mi dolor, dormir y quizá la próxima semana todo sea mejor. Incluso que el frente frío ya se haya ido.

domingo, 7 de noviembre de 2010

#1




Tomo un té, y una pastilla para dormir a las 6.45 de la tarde de: claro! un domingo 7.
Y aunque quizá lo que tengo que escribir el día de hoy pocas personas lo comprendan. Tengo que sacarlo de mi sistema antes de que la pastilla haga efecto.
Un hombre, un mensaje, 4 años, y estoy literalmente destrozada.
Hoy puse fin... cobardemente por mensaje de texto. Humillada hasta el tobillo, Vencida por alguien más.Seguramente más caprichoso que yo, o quizá por una verdad que apenas estoy comenzando a digerir.
No tengo fuerzas ni ánimos de nada. Estas cosas no deberían de pasar en domingo. Deben suceder en jueves y viernes para poder llenarnos las venas de alcohol hasta que nos salgan várices y seguramente terminemos en unas sábanas que no reconocemos intentando validar a lo pendejo nuestra feminidad.
No sé que es lo que va a pasar mañana. Tampoco sé cuantas botellas de agua podré llenar con las lágrimas de dolor, desilución y esperanza que hoy se fueron al mismo tiempo que se fué la luz del día.
Sigo sin comprender por qué existimosen el mundo tantas mujeres que tenemos nobleza (y no lo digo nada más por que si) que tenemos que pasar por estas cosas para aprender algo, que al día de hoy no sé qué eso.
No sé porque a las malas mujeres les va bien, a las que exigen, hacen dramas, panhos y tdas esas cosas qe en las pláticas entre hombres se quejan pero ahí estan, Descartando por completo a un amplio sector de la población que tenemos valores, que sbaemos luchar por lo que queremos, que trbaajamos, somos autosuficientes y aún así nos queda tiempo de enamorarnos, amar, hacer las cosas con el corazón y entregarnos por completo solo pidiendo a cambio lo único que nosotras no podemos darnos, una buena conversación, confianza, compañerismo y por supuesto compañía.
Estoy oficialmente aterrada de loque sigue. Sé que tengo que cambiar mi vida y mis hábitos por completo para comenzar de nuevo, reconstruírme y seguir adelante.
Pero el dolor es tan grande que no puedo más que describirlo como un desgano masivo en el que mis atriculaciones responden ante el globo que tengo atorado en la garganta.
Y ni siquiera pude terminar de frente. Solo pude decir "hagamos como que esgto jamás sucedió y que cada quien siga su vida. Sé feliz, Gracias por todo y prometo que no volverás a saber de mi"
Sé que estoy enojada, pero no puedo ni quiero ser grosera con algo que amé demasiado y que poco a poco me dejó ir sin interés alguno.
Ante eso qé se hace? Juego a Britney y me rapo en un acto radical de rebeldía? Juego a Lindsey y me dedico a las drogas, al alcohol y al lesbianismo? o simplemente duermo en espera de que el tiempo pase y que quizá todos eso hombrecitos que imgino que están ntentando reparar mi corazón  a marchas forzadas puedan ponerle los simientos suficientes como para que esto jamás me vuelva a pasar.
Y aunque eso signifique quedarme sola... prefiero encontrar mi verdadera paz interna, antes de volver a creer en esos ojos verdes.
Estoy aterrada y desconsolada.... Ojalá y los próximos posts tengan mejores noticias.

La llegada de los frentes fríos.

Pues si... madrugué demasiado en domingo. Quizá es porque la neta he dormido taaaaaaanto que con todo y pasta ya mi cuerpo me pide que me levante de la cama y me ponga a hacer algo.
Por lo pronto, y aún que estuve arrastrandome por todo mi edificio, las metas del día de ayer fueron concluídas con éxito. Lave ropa, aproveché para tomar un poco de sol en la azotea de mi estupendo (not) edificio y a pesar de mi pereza leí libro y medio.
Hoy puede que sea un día fácil o difícil, hayc osas que hablar según esto y como siempre hay una pequeña luz de esperanza en mi que quiere que las cosas se arreglen pero tampoco le tengo ya tanta fé a mi santo.
Hace frío, hace sol, mi mente comienza a despabilarse (creoque por tanto dormir) y me siento de buen humor aunque no quiero bañarme para salir con mi hermana y no por pereza sino poruqe hace frío.
Ojalá hoy sea un buen día.

sábado, 6 de noviembre de 2010

Sabasleep

La mayor parte de las personas que conozco, añoran la llegada del sábado para ingerir cantidades extremas de alcohol, esuchar música a alots niveles de volúmen, flirtear y cerrar ojos en lugares públicos, donde seguramente asisten millones de personas que tienen las mismas intenciones que ellas.
Eso a mi no me ha llamado mucho que digamos la atención desde los 24 años y aunque he ntentando hacerlo un par de veces en los últimos años logrando divertirme un poco.  Debo de aceptar que ese asunto no es para mí.
Tengo una semana un poco conflictuada entre emociones, sentimientos, ira y coraje. He optado por el deporte extremo llamado "evasión" así que he dormido más horas que todas mis horas de insomnio juntas y la he pasado tan bien que creo que es una buena decisión bautizar nuevamente este sábado como sabasleep...
Todo se conjuga para que así sea. El frío, mi dolor de cabeza, y las ocupaciones de los demás me dan toda la oportnidad de volver a cerrar mis ojitos, dejar pasar el tiempo y despertarme con una sonrisa gracias a los bonitos sueños que tengo.
No sé si tanto dormir me hará bien o mal. No sé si este asunto de la evasión después haga que las cosas sean más fáciles o más difíciles. PEro lo que si sé es que no quiero estar pensando en pendejadas ni tampoco llorar más por cosas queno están en mis manos. Por panchos tontos... Y sobre todo por enfrentarme a la realidad de que durante años me tragado dosis inconcebibles de mentiras que el día de hoy me tienen enferma.
Por eso es mejor dormir....
Buenas noches

martes, 2 de noviembre de 2010

Novimbre 2.... día de muertos?

Las tradiciones que tienen que ver con la muerte las desconozco por completo. No sé qué día es el del jalogüin, el de los pequeños difuntos, el de los adultos, cuándo se pone el altar y realmente el significado del zempasuchitl si es que así se esribe el nombre de esa llamativa florecilla.
Sé que es 2 de noviemre, que este fué un fin de semana largo, que debo desde el sábado en lanoche dopada para dormir cosa que ha sido deliciosa pero absurdamente evasiva, que tengo que lavar ropa, pintrme las canas y sobre todo decidir algunas cosas que me tienen atorada desde el sábado.
Así que más allá del tema de día de muertos, hoy quiero hacer énfasis en las mentiras.
¿Por qué mentimos? Me queda claro que tanto hombres como mujeres aplicamos ese recurso pero que ambos lo hacemos por razones distintas. Yo descubrí algunas mentiras el fin de semana que me tienen sin ánimos de nada y sin poder tomar siquiera una decisión ante el mentiroso en cuestión. He decidido sólo dormir.
Yo sé que no puedo curarme en salud diciendo que jamás he mentido, pero si puedo asegurar que omito la verdad cuando no me la preguntan y ni modo, cuando me cuestionan digo la verdad procurando utilizar las palabras menos dañinas porque enfrentar una mentira cuando le tienes tanta confianza a alguien creo que es mucho más doloroso que un grano en la oreja.
No puedo quitar la droopy face, de hecho quiero seguir dormida. Pero hoy desperté mandando un mensaje de hablar hoy, no mañana ni pasado... HOY. Creo que sólo hoy tendré el valor de descoser todo lo que tengo dentro y quizá ponerle fin a este asunto que ha traido más cosas malas que buenas aunque confieso que las buenas siempre han valido la pena.
Sólo quiero dormir.... mucho, de hecho si no tuviese labores del hogar y eliminar la edad de mi cabellera seguramente en este instante me aventaría otra pasta, aplicaría horizontal en posición fetal, y hasta mañana.
Pero sé que ya debo comenzar a acomodar mi vida. Aunque siento que no tengo nada de fuerza. Ni tantita.
No tengo fuerza para cambiar mi trabajo, para decidir qué quiero hacer con mi vida, para cambiar a la persona a la que decidí regalarle mi amor incondicional.....
Ay.... no sé cómo voy a hacerle.....
Ni siquiera sé si contestarán mi mensaje de texto.

No se supone que todas esas indecisiones y miedos son parte de la adolescencia? Ya tiene tiempo que la dejé atrás!!! por qué me sucede hasta ahora?

lunes, 1 de noviembre de 2010

¿Qué día es hoy?

La verdad no sé si es domingo o lunes. No sé qé es lo que tengo que hacer, aunque vagamente recuerdo que tengo una cita a las 11 a la que creo que no llegaé puntual. Lo bueno es que ya avisé.
He dormido mucho. Y la neta por mí, dormiría hasta mañana. No tengo ganas de nada, ni de pensar, ni de sentir, ni de soñar, y mucho menos de decidir los nuevos rumbos para pagar la renta de este hogar.
No puedo identificar el sentimiento, odio, cansancio, decidia, flojera, ira y así sucesivamente hasta que repentinamente bostezo.
Llevo dos días con un libro a mi lado izquierdo, no lo he movido ni para taparme, ahí esta. Esperando a ver a qué hora se me ocurre abrirlo.
Creo que hablé con mi papá ayer. No sé. No lo tengo claro. No tengo nada claro..... sigo anestesiada y la verdad es agradable, aunque me preocupa un poco el momento en el que esta anestesia pase.
No es aquí, en este momento en donde en cualquier película, seríe, novela o cuento llega alguien disfrazado de hada madrina, de rantoncito con el don del habla, un ángel celestial, un mendigo, o lo que sea y me dice cómo debo de cambiar mi vida, llevandome señal tras señal a dos cosas, reconocer mis errores y enmendarlos hasta el éxito.
No sé si es porque la puerta de la entrada está cerrada, pero las ventanas están abiertas, el msn online y mis teléfonos prendidos y nada de eso está pasando.... nada.
Quiero dormir, mucho..... y quiero despertar siendo otra persona. Una mucho más agradable porque me queda claro que la que soy hoy es insoportable y solitaria.
Será genético?

viernes, 15 de octubre de 2010

Cuando no hay nada que decir.

La tranquilidad es absurda. El cansancio y las irresistibles ganas de no salir de cama me señalan clarmente la evasión que quiero aplicar a mi estado de ánimo actual.
En fin, no estoy triste, no estoy deprimida, sólo estoy enojada y decepcionada de todo lo que me rodea. TODO. Mi trabajo y lo "demás".
Llevo dos días sin contestar mensajes, creo que está padre ahorrarme 1.75 más iva por mensaje si realmente no tengo nada que decir.
siempre he pensado que los mensajes se contestan, aunque sea por cortesí o educación.Pero ahora si no tengo nada que decir. Y si le pienso un poco, lo único que se me ocurre son sapos y culebras queno quiero que en esta ocasión salgan de mi boca.
Me siento tan cansada. Es como si me hubiesen quitado la venda de los ojos y hoy puedo ver la realidad, así como es. Y me duele, un poquito pero no me soprende. Es más. Me causa más enojo que otra cosa y la neta, no, no tengo nada que contestar.
Debo confesar que llevo 24 horas teniendo toda clase de escenas mentales en las que puedo aplicar diversos tipos de venganza para liberar mi enojo y que incluso algunas de esas escenas me han provocado una que otra carcajada malciosa. Y entonces arrugo la nariz y pienso "ash... por qué no soy tan mala!!!" y si. Me molesta no ser lo suficientemente mala, cruel, culera, malasangre como para poder aplicar alguna de esas millones de ideas que se me ocurren para sentirme aunque sea un poco menos enojada.
Acabo de llegar a la oficina, si fuera por mi no estaría aquí. Y si lo hice es porque aunque ya tomé la decisión de renunciar en diciembre, pues mínimo debo hacer la "finta" de aquí a esa fecha no?
Así que bueno. Jefe debe irse en un par de horas, así que en un par de horas aplicaré el "nada por aquí, nada por allá, y puffff desapareceré a mis sagrados aposentos a practicar mi deporte reciente favorito. La evasión.
Así como lo diría mi interlocutor "necesito una cura de sueño" y quizá después de dormir tooodas esas horas, tenga la fuerza, el valor, el coraje o el discurso lo suficientemente bien estructurado para darle fin a algo que jamás tuvo un principio.

jueves, 14 de octubre de 2010

El significado de "emprender la graciosa huída"

Hace un par de días tuve una conversación que se tornó en reunión de confesiones dolorosas por parte de mi interlocutor que literalmente me movieron el piso.
Creo que no vale la pena ahondar en el contexto de la historia, pero quizá en este momento lo que necesito es describir las reacciones (que no entiendo) ante tanta información fuerte que me otorgaron en dicha confesión.
Primero me enojé, después me sentí mal por haberme enojado, después me volví a enojar, y después me sentí como en catafixia de chabelo, en donde pierden la maravillosa sala de muebles troncoso y no queda más que quedarnos con la famosa y "espantosa equis".
Cuále es la diferencia entre ardor por ego y dolor por amor? Cómo reaccionamos ante cada uno de ellos? Cuál es el motor que nos impulsa a seguir adelante? Qué es lo que necesitamos para no dejarnos arrastrar por las corrientes emocionales de la persona que según esto "amamos"? Qué es más fuerte, el amor, la dignidad o el orgullo? Cuantos minutos se necesitan para convertir 2190 días de amor en un odio irrevocable? Si el amor vence todos los obstáculos, será que no amo tanto y por eso me rehúso a vencer este?
No quiero ni puedo pensar en nada más que en irme de viaje. Inventarle algo a mi jefe y salir corriendo del país a un lugar distinto con un idioma distinto sin permitir que me sigan envolviendo en un guión de kubrick.
Desaparecer... si al fin y al cabo el valor que me dan es el de una "espantosa equis" no creo que importe mucho que lo haga sin decir nada.
Hoy sólo sé que no está padre. Que a fuerza ni los zapatos. Que no necesito amenazas,´ultimátums, ni más intentos de counicación con alguien que me ve tan chiquiitititita sin darse cuenta de que no soy de ese tamaño.
Yo si lo sé. Y creo que no puedo permitirle a nadie que tenga mis emociones en un sartén pensando que puedo brincar al son que me toquen.
Hoy siento la necesidad de emprender la graciosa huída. Aunque no me de gracia ni a mí ni a mi interlocutor.

miércoles, 13 de octubre de 2010

Miércoles difícil

Como ya hice referencia. Esta semana ha sido terrible laboralmente. Tanto que me ha hecho pensar en buscar nuevos horizontes que me brinden más paga por el mismo estrés o menos estrés por más paga. El motivo del coraje del lunes fué por unos boletos de avión.
El coraje del día de hoy fue exáctamente el mismo. Vuelos vendidos y saturados, poca disponibilidad de horarios y un jefe atrapado con compromisos inamovibles jueves y viernes y sin un sólo vuelo disponible.
Así que ahí estuve. Desde las 11 de la mañana pegada a la famosa grabadora que tanto odio "gracias por llamar a aeroméxico, for english press one" e intenté todas TODAS las rutas posibles las cercanas, las no tan cercanas todos los horarios. TODO y no... no conseguí.
Él en su necedad. Voy a irme mañana sigue intentando sigue intentando. Ponme en lista de espera de todos los vuelos que encuentres, no importa lo que cueste (sin tomar en cuenta que ya le debo 40 mil pesos a la agencia de viajes por sus tonterías) Y lo intenté y me enojé y me desesperé y volví a llamar a aeroméxico y cotizé un vuelo privado y busqué opciones......
Son las 6.26 de la tarde, y después de 7 horas, lo logré. Viene mañana y en mi pantalla está ya desplegado el estúpido boleto electrónico que me hizo parir chayotes durante todo el día.
Cuánto perdí el día de hoy? Once mil pesotes regalados a las agencias de viaje. Y luego me preguntan que por qué tanto coraje no?

martes, 12 de octubre de 2010

Señalología profesional

Han sido un par de semanas bastante extrañas. Llenas de todo tipo de acontecimientos inseperados que me han puesto a recapitular y han llevado mi paciencia y tolerancia a límites peligrosos.
Durante el fin de semana, platiqué con mi hermana sobre el asunto de las "señales", ella, poco creyente de ellas, ha tenido una lluvia de "casualidades" que le hacen pensar que es momento de tomarlas en cuenta.
Por mi parte, a pesar de que desde hace un rato decidí hacer casi omiso así me golpearan en la frente, esta mañana desperté con la terrible necesidad de hacerles caso.
Ya estoy harta de mi trabajo. No soporto a mi jefe un minuto más así que es momento de comenzar a "empacar" para pasarme a retirar en el mes de diciembre y arpovechar el tiempo para ahorrar un poco de aquí a esa fecha.
Sé que dicen por ahí que si quieres hacer reír a Dios, sólo cuéntale tus planes. Así que no. Como es costumbre no tengo planes, ni ganas, ni idea de qué voy a hacer. Sólo sé que ahí ya no quiero estar. Que todas las cosas que están sucediendo en estos momentos, me estan obligando a decidir a patadas intentar cosas nuevas. Qué? Pues quien sabe, pero algo nuevo y YA.
Así que durante todo el día, las cosas se me presentaron para reafirmar la idea de que tengo que cambiar, buscar nuevos horizontes y en esta ocasión reconozco que mi vida es una pila de cosas para la basura tanto en el plano profesional como en el personal.
Contar las pequeñas anécdotas laborales que han tenido la maravillosa cualidad de mandarme directo al límite de mi paciencia/tolerancia, podría ser bastante jocoso, pero no tengo ganas de recordar las estupideces que pasan porque me rehúso a creer que alguien en verdad tenga tan poca capacidad o que sea tan caprichoso. Como lo es mi jefe.
Así que ayer. Lunes, me rehusé a ir a trabajar. Me quedé en casa, me comí un cuerno en la cafetería de la esquina de mi casa, regresé y dormí. Y desperté y comí, y volví a dormir. No quiero pensar. Me siento molesta, irritable, chocada pero con ganas de recibir eso que se llama "iluminación divina" que me de la señal CLARA para poder agarrar el nuevo rumbo.
Jamás me había sentido una extraña dentro de mi propia piel. No sé si mi interior cambió o si estoy en algún proceso de negación o de aceptación de todas las cosas que me molestan y deben de cambiar. Pero por el momento ni la experiencia que dice mi hermana tengo en aquello que ella llama "señalología profesional" me permiten ver lo que necesito para salir de este agujero.

Wedding mood.

No, no es para asustarse. Eso no quiere decir que ande viendo "preparativos" simplemente voy a una boda, y de las más complicadas. De una sobrina mía.
Por qué complicado? Pues porque será la típica reunión familiar en mi pueblo donde estará TODA la enorme familia reunida más los amigos más cercanos y donde todos tendremos que sonreír y llegar como la familia feliz y tendremos que soportar mi hermana y yo las típicas preguntas de "y ustedes para cuándo".
(Ya de regreso de la boda)
Pues ahí esabamos, vestido, tacón, y pestaña peinada. Sobreviviendo a los saludos y a los comentarios "agradables": "Ayyyy.. pero qué bien te ves, qué te hiciste? Dimé qué te estás metiendo para tener esa cintura?". "Qué guapa... jamás te había visto guapa" (plop)  "Cuentame?!!! Hay galanes? Ya te casas? Ok, algún prospecto?.. No?!! Pero cómo puede ser eso!!Como diría mi papá que en paz descanse: "matrimonio y mortaja del cielo baja, pero en esta tierra se trabaja" así que tú dime y yo empiezo a buscarte marido.
Y así pintaba la noche cuando afortunadamente mi hermana decidió darme una sobredosis de "güisqui" y muchos souvenirs de boda bailando a ritmo de payaso de rodeo para que por un momento no escuchara esas voces familiares que más que ser "agradables" se convierten en una tortura y motivo principal para reiterarme el por qué no vivo en el pueblo.
Entre el mareo, las luces de colores, las mujeres brincando por el ramo y las típicas escenas de boda que hacen que siempre siempre uno suspiré deseando lo que tiene enfrente, no pude evitar pensar en la falta que hace ahí, a un ladito. Bastante triste el asunto por cierto. Y en lugar de sentirme deprimida, regresé cansada, harta y con muchas ganas de vivir otras cosas en todos los sentidos.
En fin.
Afortunadamente no hay otra boda en agenda próximamente, cosa que considero bastante agradable.

miércoles, 29 de septiembre de 2010

Cosas sin sentido

Terrible noche de insomnio por dolor en el brazo izquierdo. En ese que llevo ya no se cuantas operaciones y obviamente espero con todas mis fuerzas que sea uno de eso dolores que causa el clima en las "fracturas viejas" y no que sea algo más... o quirúrgico.
Tres horas definiendo atuendo, entre el cinturón rojo, el blanco, el negro, la falda y mis ansias de tener la cintura chiquita.
Impotencia al tener únicamente 365 pesos en mi cuenta bancaria y darme cuenta que los zapatos de tacón que llevé a la reparadora no quedaron "firmes" y que o camino con cuidado o me rompo un pie.
Nervios terribles de haber "abierto la bocota" ayer pero una especie de calma rara por pedir disculpas sin esperar nada más que dejar de cargar con una culpa egoísta y soberbia.
Una canción de Fito que hizo rodar dos lágrimas, deshacer mi maquillaje mañanero y sobre todo sentir la "mariposa technicolor" justo en la boca del estómago aterrorizada por enfrentar mi terror al compromiso.
Mensajes extraños de hombres extraños invitandome a salir. Cosa que no sucedía nunca y en dos días hay dos invitaciones que no quiero aceptar.
6 llamadas pendientes, de temas difíciles pero que haré posibles.
Frío con sol. Dolor de garganta. Terapia a las 8. Desborde de ríos. Responsabilidad extrema. Sentimientos pasmados.
Esperar, ... paciencia.... esperar; invocar la calma. Calmar los nervios. Café frío. Monitoreos a distancia. Bipolaridad de ideas, y emociones. Frío.
Dolor de brazo izquierdo.
Penúltimo día de septiembre.... Deseos de mejor suerte para el mes que sigue.
Y ya

martes, 28 de septiembre de 2010

Un martes cualquiera

Ayer mi edificio se quedó sin agua. Y sí; por respeto a los demás decidí quedarme en casa hasta que surtieran el "vital líquido" y pudiese bañarme. Al mismo tiempo mi vanidad era superior a mi responsabilidad y no me permití salir de casa con la cantidad de canas que brillaban fluorecentemente en mi frente.
Quería un cambio, así que ahora mi cabello porta un tono castaño oscuro cobrizo que no me acaba de convencer porque la raíz es de un tono y mientras bajas la mirada te das cuenta que las puntas son ligeramente más oscuras. Hoy no me causa conflicto pero seguramente con las lavadas tendré que tomar una decisión importante, (como ir a un lugar donde verdaderos profesionales arreglen el desastre).
Otra vez mi jefe decidió que era buena idea traerme de llavero. Me citó a las 11 para "platicar" (7 minutos) del asunto pendiente, luego me chuté la visita del presidente de Líbano y cuando ya me iba a mi oficina me detuve un rato platicando y mi día se iluminó al ver a un hombre espectacularmente guapo con toda la pinta de guardaespaldas y si,.... era uno de los guardaespaldas de dicho mandatario. Vaya! qué cosa tan bella, y tan alto!! Y con unos ojos tan bonitos.... y tan coqueto.... Que si, me dieron ganas de proponerle jugar al guardaespaldas aprovechando su parecido mejorado a Kevin Costner y yo hacía el sacrificio de broncearme y hacer como que canto como Whitney....
En fin. Volví a mi realidad, aún tengo un chingo de trabajo y aún no puedo destrabar el asunto laboral que tengo pendiente. Tampoco mi asunto personal.
Y si, tengo mucha hambre, pero hoy, después de la mañana que pasé llegué a la conclusión de que debo; por motivos laborales, bajar más de peso.... cuidar mi cuerpo, incluso creo que invertir en algunas cremas mágicas debe ser opción porque la lonja de la aleta (la qu se encuentra ubicada justo debajo del brassiere) me molesta. También siento la enorme necesidad de reafirmar mis glúteos.... La gravedad está haciendo efectos y tengo que contrarrestarlos.
En fin. Un día normal....  Pero si. Tengo hambre :(

jueves, 23 de septiembre de 2010

El mundo antes de las 8 am

Siempre he sido madrugadora. Aunque siempre me vuelvo a dormir. Elegí por gusto uno de esos trabajos en los que tanto mi horario de entrada como de salida es variable; por lo tanto no tengo mayor problema en esperar a que la hora del tráfico disminuya lo suficiente como para hacer el recorrido lo "más" tranquilo posible.
Y pongo "más" entre comillas porque siempre me topo con una manifestación o cosas de esas que desquician y me hacen tardarme en ocasiones hasta media hora más para llegar al trabajo.
Pero bueno... hoy mi jefe me pidió que lo acompañara a una reunión a las 9 am. Pero muy amablemente decidió que era una buena idea que desayunaramos juntos a las 8.15.
Para ser puntual tuve que despertar antes de las 6 de la mañana (horario en el que únicamente despierto para tomar un vuelo) y salir con muuucho tiempo de anticipación porque desconocía las "condiciones de clima y tráfico" para este rumbo.
Pero bueno... hoy comprendo que el mundo de las 7 de la mañana es totalmente distinto al mundo en el que yo vivo. La gente es muucho más hostil, huraña, agresiva.
Los conductores de las 7 de la mañana son como una arma mortal o una bomba de tiempo, en cualquier momento se te avientan con fuerza, te empujan inesperadamente y son dignos de regalarnos casi cualquier enfrenón inesperado simplemente para probar nuestros reflejos o darnos "azúcar" del puritito susto.
Hoy pude notar que hay escuelas en todas partes y que los padres de familia estorban, deberían de dar educación en casa para desahogar el tráfico.
Afortunadamente llegué a mi cita justo a la hora establecida. 8.15 am y yo ya estaba sentada en la mesa esperando la llegada de mi jefe, cargando millones de papeles porque no sabía exactamente cuál era la razón por la que decidió invitarme a desayunar.  


Y ahí estaba yo. Tomando cantidades industriales de café y espere, espere, sin dejar de ver esta puerta con la urgente necesidad de que se abriera y apareciera mi jefe para poder saber qué diablos quería!. No llegaba, el tiempo pasaba, me desesperé y lo regañé vía txt msj. Pedí de desayunar.
Llegó 8.40, la reunión siguiente era a las  9 am y sólo tuve 15 minutos para preparar al "aire" la presentación de la reunión, e insistitirle en que ya era tarde.
Mientras eso pasaba, yo pensaba... calma, calma, toma un vuelo a las 13.30, sólo tienes que aguantar hasta esa hora.
Llegamos a la reunión a las 9.30 (se ve que la puntualidad es algo que usa a su conveniencia si y sólo si sea para regañar a los demás) y lo que estaba programado para durar 1 hora se extendió a 2.
Afortunadamente, y a pesar de que lo preparé a él al "vuelo", iba lo suficientemente bien informado como para acordar lo que queríamos independientemente de todos los contras que nos pusieron.
Terminó la reunión, me dió un aventón a mi auto y él (obvio después de darme una lista enorme de pendientes) se despidió de mí y se dirigía al aeropuerto.
Error!.......  15 minutos después me pidió que cambiara oooootra vez el vuelo para el último de la noche y que preparara todo para una nuva reunión para las 17 hrs.
y aquí estoy. Sentada en mi esritorio inentando despejarme un poco porque ya no encuentro ni pies ni cabeza a lo que tengo que hacer, tratando de mantener los ojos abiertos y con toneladas de trabajo.
Eso si.... totalmente convencida de que el mundo de antes de las 8 am, hace el resto del día desagradable.

martes, 21 de septiembre de 2010

El baúl de los recuerdos.

Este es el primer post del día de hoy, porque han pasado muchos días y sobre todo tengo mucho qué decir.
La primera parte, comienza con la llegada de algo que se llamó "puente del bicentenario" que más allá de ser para mi una festividad se convirtió en una terrible serie de eventos desafortunados, que al día de hoy me tienen idiota y emocionalmente deshecha.
Lo primero sucedió el 15 de septiembre. Recibí una llamada telefónica en la que me pedían que fuera a recoger unas cajas mías que estaban en la primera casa que habité cuando llegué a vivir a esta enooorme ciudad (2001).
Así que con un poco de emoción y curiosidad, recogí las cosas, las subí a mi departamento y abrí el pasado lleno de polvo y me topé con TODO lo que fuí justo al salir de la universidad.
Lo primero que salió fué ropa. Desde la talla 36 que usé alguna vez hasta la 28 que llegué a ser en mi último año universitario.
Discos, cajas, cartas, flores secas, fotos, libros, polvo,... bla bla bla.... Aquí van un resúmen gráfico de algunos detalles curiosos...
La playerita de los delfines:
Creo que es suficientemente respresentativa de una etapa bastante importante de mi vida. Esta chistosa "playerita" de manga larga es el recuerdo más chistoso de la docena de sudaderas de exnovios que aparecieron ahí. Según recuerdo, este es uno de los motivos principales por los que aborresco el futbol. Y aunque recuerdo que cuando ese personaje y yo fuimos novios, él no jugaba en los "delfines de xalapa" pero gracias a él si me chuté casi todos sus partidos y además veía ese deporte que el día de hoy me causa salpullido extremo.
Me prestó su playerita en una de esas noches que pasamos juntos diciéndome "es mi favorita"... (crickit, crickit) y hasta el día de hoy no recuerdo por qué jamás se la devolví; quizá por eso.
También localicé muchas sudaderas lindas de esas que son grandes y calientitas y que en su momento te hacen sentir siempre abrazada de la persona "en ese momento amada". Bueno. Esa relación terminó en el 2000 y gracias al dolor que eso me causó decidí mudarme de ciudad y comenzar una nueva vida desde cero. Error #1 cargar con la playerita para que apareciera repentinamente 9 años después. Ooops.!

La primera manualidad:
Pues sí. En aquel entonces, y teniendo mi primer empleo en el que con trabajo (mucho trabajo) me pagaban 2 mil pesos mensuales. Era casi imposible hacer compras compulsivas y/o relajantes. Además pasaba mucho tiempo encerrada porque obviamente no podía gastar casi en nada.
Una de esas tardes de nada que hacer y con unos jeans rotos, se me ocurrió la brillante idea de pasar el rato haciendo una bolsa "coqueta" para los fines de semana en donde pudiera meter más que nada libros, revistas y chucherías para llevar a mi sobrino al parque. Fué mi primera manualidad. Hilo, aguja, tijeras e imaginación... y 9 años después ese retazo de pantalón seguía guardado sin que se hubiese roto ni una sola costura. SI todo lo cosí a mano. Qué taaaal!!!!

La típica servilleta con el teléfono de alguien:

Obviamente siempre en las bolsas quedan cosas guardadas. Y además de encendedores, plumas y uno que otro lipgloss seco me encontré la famosa servilletita con el celular de?.... no sé porque no le puso nombre. Lo que me hace pensar que tampoco le llamé jamás pero si me hace recordar que en ese entonces sí salía, si coqueteaba, sí recolectaba números y jugaba a no llamarles.
Tiene taaaanto tiempo que algo así no me pasa que bueno... por qué no tomarle una foto antes de mandarlo... directamente a la basura.



Una de tantas cartas:
Ufff... pues si, como era de imaginarse me encontré viejas "loveletters" pero si elegí esta en particular es porque es bastante curiosa por muchas razones.
En el verano del 2001 conocí a un escocés en CanCun, era bastante agradable, platicabamos de música mucho, y sí... nos besuquéabamos divinamente en una versión "light" de gringo en spring break. Terminó el verano, compartimos teléfono, direcciones postales (siiiiii todavía en ese entonces se compartían las direcciones postales) y también mail. Obviamente y como siempre sucede jamás pensé en que volvería a saber de él. Cuál fué mi sorpresa que un par de semanas o quizá un mes después recibí una cajita desde Escocia, con muuchos regalitos, un gorrito, un muñeco, discos y esta carta.
Estuvo raro darme cuenta del poder de coquetería y/o flirteo que manejaba en ese entonces pero bueno. Tenía 22 años y justo eso era lo que tenía que hacer no? Conocer el mundo. Y vaya que lo conocí. Sólo no recordaba haber hecho un "tour" por Escocia.

En fin... después de haber visto todo lo que ví, de recuperar algunos libros que sí extrañaba decidí ser generosa regalar TODA la ropa que ahí estaba y lo demás se fué directo a la basura. Si no me hizo falta en 8 años, seguramente no me va a hacer falta nunca más. Lo que si me costó trabajo es darme cuenta de cuánto tiempo ha pasado, que aún no he hecho nada importante con ese tiempo, que ahora mi liquidez es un poco mejor, y sobre todo que casi toda la ropa de aquel entonces me queda enorme así que como los vinos... me hago más buena.


Repentino e inusitado cambio de planes.

Hace un rato escribía alguna que otra tontería que sucedió durante el laaargo puente del bicentenario. Obviamene haciendo uso de mi multifuncionalidad porque al mismo tiempo seguía la sesión, checaba documentos, arreglaba un asunto atorado desde hace un año y la mañana fluía con la tristeza habitual de haber terminado hace dos días una relación infinita, y con el típico recurso de distracción que es precisamente hacer mil cosas a la vez.
*Pliiiin* sonó mi celular.... y de ese número del que no debía contestar, llegó un mensaje solicitando mi ayuda.
Sí, sí... puedo parecer un poco ingenua pero realmente pensé que el contacto era por algún asunto laboral y obviamente con eso de no mezclar los negocios con el placer, contesté y dije "si, dime".
Lo demás fueron mensajes con un texto que en ningún lugar podía notar que se requiriera de mi intervención para algo.
Ahí llegó la estocada final. Por respeto a mi dignidad, no haré comentarios sobre lo que me dijeron. Pero lo que si quiero hacer es expresar exactamente cómo me sentí.
Basura!.... Justamente eso.
Ya me sentía lo suficientemente vacía, triste, jodida y rota. No necesitaba más. No merecía que me insultaran de ese modo. Que me recalcaran la idea de que todo llegó a su fin. No necesitaba que me leyeran en voz alta las letras chiquitas que claramente informan que el contrato está terminado y que este terrible dolor es parte de la compensación por haber fallado al mismo.
No necesitaba eso.
Hice todo todo todo lo posible por demostrar que no soy una mujer como las demás. Por hacer evidente con hechos que jamás me interesó el dinero ni mucho menos las cosas materiales con las que alguien pretendiera demostrar su "afecto" (y uso esa palabra porque dudo mucho en cualquiera que signifique algo más intenso).
Mucho menos necesitaba que me restregaran en la cara que esos objetos materiales eran la manera de lavar las culpas por no sentir lo mismo.
Estoy tan herida que no puedo respirar. Siento un profundo vacío en el pecho que no deja pasar el aire. Me duele la cabeza y tengo taaanto trabajo en el que sí es bueno concentrarme, pero no puedo.
Me siento pateada, herida, jodida....
Mi mamá siempre me dijo. Jamás aceptes nada material de un hombre, porque siempre va a querer cobrarse. Hoy esa frase tiene un significado aún más doloroso.
Lamento mucho ser tan digna..... Pero no me voy a quedar así.
Espero poder hacer lo que pretendo pronto y sobre todo. Demostrar por última vez con UN solo hecho: "que yo no soy el tipo de mujer al que estás acostumbrado a tratar".

lunes, 13 de septiembre de 2010

Como niña héroe....

13 de septiembre... Sí. Bicentenario y esas cosas.... Y no olvido que se supone que hoy es el día de los niños héroes.
Bueno... el punto. Fin de semana raro... Productivo en cierto modo, porque poco a poco voy avanazando en mis proyectos para "hacer dinero".
Lo demás... ha sido literalmente un torbellino. No se califica, pero pinta para interesante y quizá en cierto modo "idependiente" por aquello de que se acerca el 15.
En fin... hace un rato me agarró la confusión y me dieron ganas de jugarle a la "niña héroe", envolverme en papel de bolitas de plástico y aventarme desde el piso 15.... Pa'conmemorar el día no?
(tampoco es tan grave)

miércoles, 8 de septiembre de 2010

El implacable poder de Murphy

Esta mañana desperté lo más temprano que pude. Desafortunadamente todos los esfuerzos fueron en vano ya que el tráfico de esta amada urbe hizo que mi recorrido a la oficina fuera de una hora con 50 minutos cuando normalmente únicamente hago 40.
En el trayecto recibí la llamada de una amiga, de la cual me distancié hace un par de meses ya que ella en su genuina preocupación por mí, me dijo un par de cosas que no me gustaron y yo reaccioné diciendole que a partir de ese día simplemente ese tema estaba vetado entre nosotras.
De ahí en adelante un par de malentendidos sumados a la poca paciencia que la convalecencia de mi trastorno hormonal me generó, me dieron todo el poder de decidir no hacer nada para aclarar nada.
Así que durante dos meses, ni nos llamamos, ni nos escribimos, y yo levemente me enteré de sus problemas laborales vía facebook.
Así que hoy, justo a las 9 de la mañana, cuando mi semana es caótica y me encontraba atrapada en el tráfico, ella llamó para que platiquemos mañana antes de que ella se vaya a España con el novio con el que ya lleva un año.
Colgamos.
Mientras seguía atrapada en el tráfico me dió muucho gusto por ella. Pero confieso que sentí envidia porque tiene ya un largo rato que a mi no me pasan esas cosas padres cursirománticasmelosas que son dignas de compartir por teléfono con una amiga mientras estamos atrapadas en el tráfico.
Llegué al estacionamiento. Me bajé del coche y me percaté de que el cierre de mi pantalón estaba abierto. Por tratar de subirlo discretamente, atoré mi tacón de 10 cms. en un hueco de la maravillosamente pavimentada banqueta y me doblé el pié.
Así que crucé la calle, intentando disimular con mi bolsa el asunto del cierre, dando brinquitos por el doblón de pié y contestando el teléfono en el que ya habían 2 mil doscientos pendientes y mientras trataba de subirme al elevador, justo atrás de mi un cristiano venía respirandome en la nuca y al quitarme se quedó ahí parado, viendome como si yo fuera pollo en vitrina de rosticería. Era obvio que para esa hora mi paciencia en general estaba siendo un reto de concurso para Murphy.
Obvio perdí el elevador y tuve que esperar otro, para llegar y toparme con otra tonelada de papeles, llamadas, y 3 asuntos de suma importancia qué resolver antes de las 12 del día.
Si yo pensé que agosto fué un mes difícil; jamás me imaginé las sopresas que tendría Murphy guardadas para mí para el bicentenario. (porque además hoy me mandaron el mapita en el que me avisan qué tendré que teletransportarme de mi casa a mi oficina porque cerrarán todos los accesos)
Será que tenga paciencia para lo que sigue? No lo se. Por el momento me duele el tobillo derecho, me quité los zapatos, tengo que hacer un boletín que se le acaba de ocurrir a mi jefe. Mañana hay una reunión a la que si le tengo muucho miedo, pero hoy tengo terapia. Eso, si el tráfico y mis pendientes me permiten llegar a tiempo.
Gracias Murphy, eres un ángel.

(Chelle, BTW, feliz cumple!!!! tecueme a lot!)

martes, 7 de septiembre de 2010

Día malo. Malo, malo, malísimo

Todo comenzó muy mal, cuando desperté aún sintiendome bastante mal de gripa; era bastante tarde, y obviamente junté todo el poco ánimo que los mocos me brindaron para poder venir a trabajar.
Desde que llegué, llamada tras llamada. Primero la repatriación de un cuerpo, después darles la noticia a los familiares que en 36 hrs de viaje desde Texas hasta Cárdenas, Tabasco;  tendrán a su familiar pero que en el accidente en el que murió, su cuerpo quedó deshecho y que por ningún motivo podrían abrir la caja para verlo por última vez. Cuando su mamá me llamó y me dió los datos, me dijo que justo hoy su hijo estaría cumpliendo 25 años. Así que fué horrendo, llamarle a la hermana, dandole fríamente la información y suplicandole que recordaran a su hermano tal y como lo vieron antes de partir.
Después de eso, nuevamente recibí al Ing. que sigue teniendo la fórmula mágica para evitar inundaciones pero que nadie lo quiere escuchar. Llegó con el mismo traje raído, el mismo portafolio desgastado y el mismo discurso de siempre.
Llamadas, llamadas y más llamadas. La niña con leucemia sin recursos, las inundaciones, la reunión de protección civil, los boletines, mi asistente con problemas personales y su necesidad de pedir consejo, y justo en medio las exigencias tontas de la esposa de mi jefe y por qué no; mi jefe mismo pidiendome una recomendación de un restaurante italiano aquí cerquita con reservación ahorita.
Después, problemas con el ahora monopolio de aeromexico, conseguir viajes imposibles a precios inalcanzables y sin que el cosmos me brinde el poder de convertir post its en fajos de dinero para poder resolver asuntos y sobre todo ayudar a tanta gente.
Y entre todo eso, por qué no? La llamada de mi ajustadora de seguros para recordarme que el diá de mañana pasarán por el pago semestral de mi seguro de gastos médicos, lo que significa seguro que este mes tampoco pagaré el teléfono de casa.
Cosas más, cosas menos, algunas que no puedo escribir, y sobre todo entre doscientos cof cof's, media caja de kleenex, dos tazas de té y 4 aspirinas efervecentes, el día de mañana pinta mucho peor. Aún no sé cómo voy a resolver determinados problemas que sin Rivotril seguramente me quitarán el sueño y me impidirán llegar a la reunión de mañana a las 8.30 de la mañana.
Desperté con gripa y mocos, pero con un panorama completamente distinto, y el día se complicó tanto que justo en este instante sigo sentada en mi escritorio pensando cuáles deben ser las palabras indicadas para notificarle a mi jefe la bola de nieve que se nos viene encima.
No he comido, tampoco tengo hambre, pero realmente deseo un abrazo y sobre todo el día de hoy un reconfortante "todo va a estar bien" y al contrario. Tendré que llegar a mi casa, a levantar todo lo que dejé regado por el piso por haberme despertado tarde, a saludar a mi oreganón y mi albahaca, a tomarme una pastilla y a esperar un poco de iluminación divina para poder sacar esta semana adelante, entre mi propio concierto de cof cof y atshuuu. Vaya mes Patrio!

domingo, 5 de septiembre de 2010

Creatividad compulsiva

En la enorme necesidad de ocupar mis fines de semana en algo más que pensar en tonterías. El viernes por la noche se me ocurrió la brillante idea de comenzar un nuevo proyecto.
Ayer por la mañana me desperté temprano y fuí por todos los "materiales" necesarios para poder llevarlo a cabo.
Fué así como llegué al "paraiso de las herramientas" Home Depot, en dónde más allá de encontrarme gente interesante, me perdí entre tubos de PVC, llaves para baño, y me encontré con un descuentazo en W.C's.
Entre que si y que no, encontré dos cosas que quería y después de 3 horas esperando a que me cortaran una lámina de madera (que en este instante no tengo la más remota idea de qué hacer con ella), busqué clavos, tornillos, pegamento, pinturas, e incluso estuve a nadita de comprarme un taladro hasta que le llamé a mi vecino preguntando si me podría prestar el suyo (neta, no sé ni cómo ni para qué necesito un taladro) pero como sin ser dueña de mis pensamientos y compulsivamente, llene un carrito hasta que salí de ese enooorme y "mágico" lugar.
Llegué a mi casa, obviamente no podía ni siquiera bajar tanta madera del coche y es más, insisto en este instante no tengo la más remota idea de para que pedí tanta mamada y sobre todo que voy a hacer con ella o dónde diantres voy a meterla! (dónde está la creatividad y la vena "artística" cuando hace falta?)
Pero lo que si pude hacer fué utilizar una cosita que me encontré que se llama "magic cover" en un intento desesperado de remodelar en esta ocasión mi recámara.
Tengo una cajonera, herencia súper agradecida de mi amiga "Chelle", pero ya no me gustaba la combinación de colores que tenía mi habitación así que comencé por esto.
Si, si... se nota que no tengo naaada que hacer, y ayer pude terminar todo el frente antes de que me venciera el casancio pero seguramente hoy termino lo demás, y si la creatividad fluye espero poder usar la imaginación para ocupar un poco de esas tablas. Por favor. si alguien sabe ¿qué hacer con ellas? se agradecerán infinitamente las sugerencias =)
A ver cómo transcurre este domingo lluvioso.

viernes, 3 de septiembre de 2010

Skinny Jeans


Si... el fin de semana pasado por primera vez en mi vida decidí intentar probarme unos skinny jeans (o pantalón pitillo) esos que parecen como mallones y de las piernas, sobre todo del tobillo son tan angostos que con trabajo y puede uno meter el pié.
Entré!! Me quedaron. Y ya con botas encima, se disimula mucho el no agradable "trompo de taco" look así que decidí comprarmelos y hoy los porto con muucho orgullo.

Ha sido un sueño porque mis piernas siempre han sido gordas, grandes, gruesas, robustas, macizas o cualquier adjetivo que podamos agregar para enfatizar que si... mis piernas no tienen la dimensión que a mi me gustaría. Pero con el paso del tiempo y con el uso de distinto o más bien todo tipo de productos y dietas. Hoy me siento feliz en mis skinny jeans!! ASí que por lo pronto; eso alivia un poco el dolor de corazón.

jueves, 2 de septiembre de 2010

El nuevo hogar

Desde hace ya algún tiempo he llevado un blog con carácter de diario personal en el que no he tenido reparo en escribir cualqueir pendejada, anécdota o situación que se me o me ocurre. Desafortunadamente el día de hoy tuve que hacer una mudanza y comenzar desde cero porque algunas de las cosas que escribí fueron leídas por alguien a quien llamaba "novio-no-novio" y eso me causo no sólo un malentendido enooorme sino que también uno de los dolores má grandes que he sentido en mis 31 años de vida.
Comienzo en una página en blanco, con un fondo nuevo y con más privacidad que antes por dos motivos, la primera para no ser rastreada con facilidad y la segunda para tener más libertad a la hora de decir lo que se me ocurra.
Agradezco a las personas que tengan el tiempo y las ganas de seguir este diario, mismo que es una ventana abierta no sólo a mi vida, sino a mi corazón y a mis sentimientos. Y espero honestamente que en esta etapa todo salga muucho mejor.