domingo, 14 de noviembre de 2010

Enfadosa reflexión dominguera

Voy llegando de cenar y tener una conversación de esas que se dan entre mujeres. No puedo negar que me siento bastante molesta por el tono final de la charla y el asunto gira en torno al respeto.
En qué momento malentendí el verdadero significado de la palabra y olvidé aplicarla en mi vida?
No lo sé. Entiendo que para todos los seres humanos quizá el verdadero significado de esa palabra sea diferente o variable. Lo que para unas personas es una falta de respeto para otras no lo es. Pero el común denominador de lo que ha pasado conmigo en los últimops años es eso. No he sabido "darme a respetar"
No entiendo si es por un asunto de educación (porque me considero una persona bien educada) pero no sé poner en práctica esa palabra para mí en las relaciones interpersonales. Y no me refiero únicamente a las sentimentales. Sino a TODAS las relaciones.
Quizá es un asunto genético que tenga más que ver con mi intolerancia a las personas y mi código genético medio oriental que me dice que diga que si a todo y ha tenido muda esa vocesita interna que dice... eso no es lo correcto.
Hoy me siento un poco enfadada por no poder exponer el punto. Por no ver que los demás respeten a los que quiero y sobre todo porque eso me reflejó el poco respeto que tengo por mí misma al permitir situaciones quizá estúpidas pero que evidentemente resultan una falta de respeto a mi tiempo, mi trabajo, mi caridad, mi humanidad, mi amistad, mi cariño y mi condición de mujer.
Desde hoy, que es el momento en el que me doy cuenta, pretendo modificar eso y comenzar a darme mi lugar. O el que creo que tengo y me he ganado a pulso con años y años de ser respetuosa con los demás.
Será que podré?

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